La historia de uno de los personajes más preponderante de la historia moderna de la ciudad de Mercedes, la vida de Eulogio Cruz Cabral «El Adelantado».
En los albores de este siglo apareció en el escenario ganadero mercedeño hombre singular y tal vez excéntrico en su época de modalidad apática y comprensión escasa, que con su empuje de tesonero y guiado por un ideal, modificó el ambiente llevándolo a la apatía e indiferencia al dinamismo creador.
El resurgimiento del agro mercedes año como elemento de progreso se dio a este hombre de iniciativa y de arraigo que sin doblegarse las dificultades impuestas por la ignorancia imperante el campo correntino, concibió la idea de la asociación para la mejor defensa y adelantó del agro mercedes año creando la «Sociedad Rural Correntina de Mercedes» en el año 1900 a corto plazo de la 2ª crear en el país la de Rosario Santa Fe. Este hombre de progreso se llamada Eulogio Cruz Cabral.
En la primera reunión con el propósito de cambiar ideas para la formación de la Sociedad Rural de Mercedes se impuso nombre de “Sociedad Rural Correntina de Mercedes” por ser la única existente en la provincia y juntamente a ellos por unanimidad de los presentes se eligió el primer presidente que recayó la persona autora de su creación Don, Eulogio Cruz Cabral.
Se caracterizó su presidencia por su dinamismo extraordinario desplegado dentro y fuera de la institución y si es que justamente con 2 Exposiciones ferias realizadas en el segundo año de su fundación con resultado altamente a la halagador por la cantidad y calidad de los productos presentados y por el monto de su ventas, introducía en sus establecimientos maquinarias agrícolas con intención de mecanizar el agro por primera vez en la provincia como previendo que 60 años después, gobernantes y gobernados clamarían como una necesidad a imperiosa para la mayor productividad del Campo dando la razón a s visionario que en su época aparecía como un iluso.
Nació en la ciudad de corrientes el 8 de enero de 1856, hijo de una familia de rancio abolengo, su padre fueron Don Eulogio Cruz Cabral y doña Mercedes Latorre. Su esfuerzo fue inquebrantable y no escatimó junto al aporte espiritual, el aporte económico cuando las circunstancias les solicitaban.
Caballero y señor, figura respetable genuina de nuestra sociedad supo aquí la tarde las virtudes de una tradición tan son rosa y distinguida por su actuación descollante, generosa, proficua y desinteresada a través del rielar de su existencia.
Factor preponderante de progreso de las actividades agropecuarias y ponente de garantía y seguridad de los negocios y la banca por su honestidad sin tantas y su rectitud en todos los actos de su vida. Hombre de profundas y leales convicciones políticas. Sincero y desinteresado servidor público. Representante auténtico de la generación de las últimas décadas del siglo pasado y las primeras del presente diera tantos hijos ilustres, sin proponérselo lega un ejemplo imperecedero y significativo a las generaciones presentes y futuras.
Correntino de fibra, un hombre que siempre puso todo su esfuerzo, sus energías y hasta su peculio personal en pro de las actividades instituciones que significarán un factor de progreso para su Provincia. Formo su hogar con Doña María Cabral, su prima con la que tuvo varios hijos se supo hacer honor a sus antepasados formando un hogar respetable.
En respecto a la actividad agropecuaria fue un verdadero “pionero” de la ganadería. Sus grandes predios constituyeron el orgullo de su generación. Levantó el primer establecimiento modelo en la provincia. Sus estancias “El Socorro” y “La María” se convirtieron en prestigiosas cabañas que hablaban de sus inquietudes de progreso. Luchador incansable en frente a la diversidad redoblando esfuerzos con su empuje transforma es hacia tierras semi vírgenes en la base del panorama actual del campo correntino.
Activo, inquieto, emprendedor fue un adelantado en su época. Presidente la gran importancia de la mestización para incentivar la economía, al mejorar el ganado criollo con cruzas entre los toros más sobre salientes que comprara se encontraba “Young”, un colorado de mucho peso. Años después decir formar en su Estancia “El Socorro” un plantel de Hereford, para lo cual compra en Palermo toros y elige de Don Eusevio Balbastro 100 vaquillas de las mejores.
Establece en “La María” un muy buena y afamada cabaña de vacunos Durham, primera en la provincia. Piensan que debe mejorarse los medios de trabajo y adquiere yeguarisos Anglo y Percherón. Lo tienda la cría de la nariz y trae planteles Ramboulliet de Pedigree. En esa época no se conocía haciendo inmunizada y buen número de los reproductores traídos de la provincia de Buenos Aires, generalmente destacados ejemplares adquiridos en Palermo caen víctima de la garrapata. Pero el entusiasmo no decae y continúa el intento con perseverancia y al éxito al fin se impone.
Asegura los alambrados perimetrales y comienza establecer el piquetes y potreros de menor intención que los que se conocían importe importando de Inglaterra alambres y varillas de hierro. Trae también por primera vez molinos de viento y los instala en diversos puntos de sus establecimiento, para lo cual adquiere una perforadora. Levanta a arboledas en protección y decorativa en “Las Marías” y una magnífica residencia, contratando a un jardinero francés que delinea y cultiva los espléndidos y magníficos jardines y quintás de su Estancia. El “El Socorro” recupera a campos echando abajo montes impenetrables con topadoras.
Por primera vez se levanta a terraplenes y construye camino entre éstos el camino de “El Socorro” a Mercedes, cuyo Puente de Piedra sobre la Arroyo Ayuí, construido por un ingeniero contratado en Francia, hace pocos años fue modelo de eficiencia y buen gusto, y cuyas terraplenes hasta el día de hoy permanecen en condiciones de uso.
Piensa que la unión hace la fuerza, y el esfuerzo común multiplica los resultados. No escapan a sus pensamientos las ventajas de la acción social y el 29 de octubre de 1900, a instancias suyas y por su feliz iniciativa, se reúne en el pueblo de Mercedes un grupo de vecinos en asamblea pública con el fin de fundar y organizar una sociedad de hacendados de la zona; y si no nace “La Sociedad Rural Correntina de Mercedes” por ser ésta la primera en su género creada en la provincia. Nadie mejor que Cabral para presidirla, y se lo nombra en el cargo, que lo desempeño en sucesivas presidencia desde el 15 de enero de 1911 por su actividad, visión, rectitud y generosidad.
De inmediato se adquieren Las chacras que forman su predio, alguna de ellas costeadas con su peculio personal y donados a la sociedad. También de su peculio personal se constituye gran parte del galpón grande que un subsiste y el molino. Para esto se trajo la perforadora de su propiedad y personal adecuado, encargó la torre del Molino y bomba correspondiente que también donó. De igual modo postes y maderas con lo que se construyen bretes y corrales. Su figura como ganadero era bastante conocida en la Capital Federal y su amistad con grandes personalidades de la épocas y tradicionales familia de Buenos Aires, le brindaron la oportunidad de conocer los mejores establecimientos e instituciones del agro argentino.
También fue fundador de la Sociedad Correntina de Hacendados, con sede en Corrientes Capital, contribuyendo con su peculio personal para la construcción de instalaciones. Fue también su primer presidente, cargo también desempeñó en varias oportunidades posteriores, lo sorprendió la muerte siendo su Presidente Honorario.
Fundo el Jockey Club de la Ciudad de Corrientes del cual fue su presidente propulsor, cargo que desempeñó durante 10 años en forma entusiasta e incansable. El Jockey Club se constituyó por la acción principalisima de Don Eulogio Cruz Cabral, que aporto a su organización y desenvolvimiento del concurso inapreciable de su actividad personal y sus ingresos particulares bajo el prestigio de su encomiable rectitud.
En los negocios y en la banca también le ocupo destacada actividad, ya que el Banco Popular de Corrientes se debe a Don Eulogio Cruz Cabral. Esta es otras de las realizaciones cuya presidencia del directorio la desempeño durante largos años.
La Vida política Fruto de sus profundas y leales convicciones, le dedicó al Partido Liberal, del cual fuera uno de los puntales. Cuando se le ofrecían cargos descollantes los rechazada con su acostumbrada franca sencillez con una modestia poco frecuente los hombres de su figuración, Pero no obstante por sus relevantes condiciones, fue obligado en numerosas veces a desempeñar elevadas funciones. Fue Vice Gobernador durante la Gobernación de Juan Esteban Martínez, realizando desde su cargo obra eficiente y desinteresada. Más tarde fue requerido para ocupar el cargo de intendente municipal de la ciudad de Corrientes, y fue tan efectiva su gestión, que lo llamó 2 veces más para desempeñar igual cargo en la comuna capitalina. Inflexible en el cumplimiento de sus obligaciones, dada ejemplo a sus subordinados, concurriendo diariamente, él primero, al cumplimiento de sus funciones. Su acción al frente de la comuna la desarrollo recorriendo paso a paso la ciudad, visitando sus barrios apartados, tomando sugerencias y observando las necesidades. Apasionado del Bien público, en horas de apremio de económico, sostenía a su expensa varios servicios públicos diarios. Su figura popular era conocida y apreciada por todos y todas partes, concurriendo siempre sin acompañamiento.
Fue integrante de la Convención Constituyente del 1913, de la que se convirtió, por su actuación, en uno de los miembros más eficientes. El último cargo público que desempeñó fue el de Jefe de Policía de la Provincia, durante el gobierno de la fórmula Contte Resoagli, y de cuyo Colegio Electoral fue presidente. Pudo ser miembro del Congreso de la Nación, como Diputado o Senador, cargos que más de oportunidad, se le ofrecieron; pero Cabral, por aquella fuerza telúrica que lo atraiga a su terruño, nada quiso fuera de la provincia, y por su acrisolado desinterés nada quiso para si. Luchada y ponía su fortuna a favor de la causa de sus nobles ideales que defendía.
Socialmente fue una figura expectable. Su casa adornada con valiosas obras de arte que nos hablan de su espíritu culto y buen gusto fue centro de reunión de todas las figuras de su época. Artistas, científicos, políticos, encontraban en las reuniones que allí se realizaban, el marco propicio brillante de sus actividades.
Fundo del Club del Progreso; íntegro y presidió la mayoría de las comisiones que organizado con distintos propósitos. Factor eficiente y muy destacado sotenedor de las sociedades de beneficencia y San Vicente de Paul.
En sus postrimerías la fórmula le fue esquiva, por lo que pasó los últimos años pobre, recluido en su domicilio donde una parálisis lo redujo a la impotencia. Pero cuando ya no tuvo más dinero para dar, siempre encontraba una sonrisa y un consejo sano y optimista para quien solicitaba su ayuda. Tal es, en síntesis, la vida de este correntino ilustre, Eulogio Cruz Cabral, personalidad polifacética, que nuclea su línea de fuerza en campo en progreso, visionario del futuro, caballero y gran señor, supedito todo su mundo a su acendrado desinterés y su Pristina rectitud, dejándonos como herencia preciada el inconmovible, aun en la hora vesperal y en el ocaso de su vida, la trayectoria de su sino junto a su consejo edificante y la sonrisa bondadosa como última elección de su existencia.