Anna María Tesser de Pears, nacida en la Provincia de Buenos Aires, llegó a Curuzú Cuatiá en 1958, donde formó su familia junto a Malcolm Pears. Juntos, recorrieron diferentes campos de la zona hasta que, en 1969, se establecieron definitivamente en Mercedes.
A principios de la década del ‘80, a instancias del Doctor Páiz, se unió a Olaya Brian de Ansola en la creación de la Fundación “Manos Correntinas”, dedicada a apoyar y promocionar las artesanías tradicionales de Corrientes. En esta institución, Anna María desempeñó un papel fundamental como primera Vicepresidenta y colaboradora incansable.
Su compromiso con la fundación la llevó a recorrer parajes y localidades en busca de artesanías, que luego promovía y vendía en Mercedes y en exposiciones de gran prestigio, como la Exposición Rural de Palermo, en Buenos Aires. Gracias a su dedicación, muchas artesanas mercedeñas lograron mejorar su producción y fortalecer su economía familiar.
Además de impulsar la promoción y educación de las artesanas, Anna María fue una pieza clave en la consolidación de “Manos Correntinas” como un referente en el ámbito artesanal. Durante años, recorrió distintas provincias y participó en numerosos eventos, llevando el arte y la tradición correntina a nuevos horizontes.
Hasta el año 2021, continuó siendo parte activa de la fundación, dejando una huella imborrable en la comunidad. En reconocimiento a su incansable labor, el Gobierno Municipal de Mercedes le otorgó un homenaje en la Expo Mujer Emprende, destacando su invaluable aporte al arte y la cultura local.